En esta publicacion estoy hablando en teoría de cómo puedes lograr algo en tu vida, lo que se necesita es experiencia, es práctica, es tenacidad, es motivación y sobre todo es pasión y fe en ti mismo.

1) Responde las preguntas que te ayudarán a definir tus metas

Para saber exactamente el camino que deberás tomar para llegar a tu destino y desarrollar el proyecto de tu meta más completo, necesitas hacerte estas preguntas:

¿En dónde estas ahora?

Para poder saber qué camino tomar para llegar a un lugar, primero necesito tener como referencia en dónde estoy ahora para hacer mi plan de cómo llegar. Si quieres ir a una Ciudad específica, buscas en el mapa y localizas el camino que debes tomar desde donde estás hasta donde quieres llegar. Si no sé en dónde estoy, no sabré qué camino tomar. Entonces define primero en dónde estás en estos momentos de tu vida, para que te ayude a tener claro en tu mente, cuáles son tus circunstancias y definir con ello tu situación actual. La segunda pregunta que te debes hacer es:

¿Qué es lo que quieres lograr?

Necesitas definir bien qué es lo que quieres hacer con tu vida de ahora en adelante para poder hacer tus planes y ponerte a trabajar en ellos. La siguiente es:

¿Cómo te sentirás cuando hayas alcanzado tu meta?

Está probado que visualizar lo que deseamos nos ayuda a enfocarnos en ello, pero es aún mejor cuando además de visualizarlo, le pones emociones. ¿Cómo te sentirás cuando hayas conseguido lo que quieres? Involucra los sentimientos y practica esto diariamente con tus metas, para que tu mente se mantenga enfocada en las prioridades de cada día que te llevarán a lograrlo.

2) La regla más importante que debes seguir si deseas lograr el éxito es 

Escribir tus metas, porque solo realizarás tus sueños si primero los conviertes en metas, y esta magia la hace que los escribas en un papel, el punto importante es cómo debes hacerlo.

Todos sabemos ya que es necesario escribir las metas para poder definir y organizar bien lo que se desea lograr y entonces crear un plan de trabajo para irlas llevando a cabo. Debes primero escribir sin ningún tipo de preocupación lo que te gustaría ser, tener y vivir sin importar el orden, primero deja fluir tu creatividad y deseos y ve anotando en el papel lo que vaya surgiendo. Después viene el trabajo de organizar esa información y de redactarla correctamente.

¿Pero cómo se deben escribir?

Para ayudarte a convertir tus metas en realidad, debes escribirlas con lujo de detalles.  Escribir un concepto general no te ayudará porque será confuso ya que le faltaran detalles, y también es importante escribir tu meta en el tiempo presente, es decir, como si ya la tuvieras, la frase debe decir “tengo una casa hermosa con estas características”, porque para el Universo no existe el tiempo, “lo tengo ahora” acelerará las energías que proyectas para que te llegue.

3) Las preguntas que te debes hacer antes de actuar

Una vez que tienes bien definida tu meta, es el momento de analizarla para reforzar la idea de llevarla a cabo. Para ello hazte la siguiente pregunta:

¿Porqué deseo alcanzar esta meta?

Medita un poco sobre esto y enlista las razones tratando de imaginar los beneficios. Escribe estas razones en la parte posterior de tu tarjeta en donde hayas anotado tu meta, para que cuando la leas, también leas las razones del porqué deseas aquello que anotaste, esto te mantendrá enfocado y motivado en lo que debes hacer para irte encaminando a convertirlo en una realidad.

Nuestras emociones son variables y tenemos días en los que nos sentimos desmotivados y con poca energía, así que saber las razones para lograr tus metas te reforzará para que a pesar de cómo te sientas.

¿Cómo me sentiré, o qué pasará en mi vida y en mis emociones si no logro esto?

Pensar en el remordimiento que tendría, el fracaso que sentiría, muchas veces me empuja a continuar en el camino sin importar los obstáculos que me vaya encontrando, mi pasión por lograr lo que deseo es mayor que todos los obstáculos, y eso es lo que debes buscar que tu meta te haga sentir, pasión, porque en los momentos más difíciles en el camino de alcanzar tu meta, es la pasión la que te empujará a pesar de que estés enfermo, de que te sientas desanimado, de que los que te rodean no te estén apoyando, o de que muchos obstáculos se te estén atravesando, la pasión hará que surjan en ti nuevas energías que te levanten y te animen a continuar circulando por ese camino que ya te has marcado y que tienes muy claro en tu mente.

4) No busques la perfección, busca comenzar ya a trabajar en tu meta.

En cuanto tengas escrita y bien definida tu meta y la tengas dividida en pequeñas tareas alcanzables cada día, define cuál va a ser la primera acción y llévala a cabo ¡ahora!
Si buscas desarrollar el proyecto perfecto para conseguir lo que te propones, nunca comenzarás, así que define el proyecto, desglósalo en las actividades que deberás llevar a cabo para conseguirlo y comienza ya a trabajar en el paso número uno de dicho proyecto. Anótalo en tu agenda y hazlo parte de tu día. Si siempre tienes en la mente la visión de lo que deseas, siempre tendrás energía y motivación para trabajar.

El momento perfecto es: ¡Ahora!

5) Revisa continuamente tu proyecto y los avances

Es importante que te mantengas al tanto de tus acciones y de si estás avanzando en la dirección correcta, por lo que te recomiendo que tengas siempre a la mano tu proyecto con los pasos a seguir, para que vayas palomeando los que ya hayas realizado y tengas presentes los que te falten. Es muy alentador observar lo que ya hemos cumplido porque eso nos motivará a continuar trabajando en lo que sigue hasta llegar a la meta. Revisa que cada semana cumplas con algunos de esos pasos para que te mantengas en el camino correcto haciendo lo que debes hacer para lograr tu objetivo. Te recomiendo que crees una carpeta en donde coloques la descripción de tu meta, tus razones para lograrla y los pasos que necesitas para completarla, y cada noche revisa esta carpeta para palomear lo que hayas realizado en el día y anotar en tu agenda el siguiente paso en el que deberás trabajar. La revisión constante del proceso de tu meta es la clave para mantener tu enfoque y concentración en cada momento del día.
También nos ayuda escribir en un diario los avances y logros de cada día para que nuestra motivación esté siempre en positivo y siempre enfocada en nuestro objetivo a lograr. La clave es escribir solo las cosas buenas del día y sobre todo lo que hayas podido trabajar en tu meta para que te sientas satisfecho de estar avanzando.

3 Reglas para escribir en tu diario:

• Escribe solamente lo que has logrado.
• Enlista incluso las cosas pequeñas.
• Hazlo un hábito diario.

6) Ten siempre tu meta visible y al alcance

Una vez que hayas definido y redactado bien tu objetivo, debes tenerlo siempre visible, escríbelo y pégalo en la computadora o en el lugar donde trabajes, enmárcalo y colócalo en tu escritorio, escríbelo en una tarjeta y llévalo siempre contigo. Lee en voz alta tu meta en cuanto te levantes en la mañana, a medio día y en la noche antes de irte a dormir, le estarás enviando el mensaje al Universo y también te estarás convenciendo a ti mismo de actuar en busca de lo que deseas lograr. La repetición terminará por convencer a tu mente de que eso es lo que deseas y entonces la convertirás en tu aliada.

7) Incrementa tu productividad convirtiendo las tareas más aburridas en divertidas

Hay muchas cosas que le damos la vuelta porque son aburridas o se nos hacen complicadas y las vamos posponiendo eligiendo llevar a cabo tareas que son más agradables. Busca la manera de hacer esas tareas aburridas más divertidas. Cuando la tarea no requiera de mucha atención o concentración, es el momento de escuchar música y cantar o de escuchar conferencias o audiolibros interesantes. También te ayuda retarte a ti mismo, piensa en hacer la tarea en el menor tiempo posible o de terminar antes de que llegue tu pareja, busca sistemas que te lo faciliten para terminar antes y mantén siempre la mente puesta en la búsqueda de nuevas soluciones creativas. Si la tarea requiere de más concentración, entonces tómate un momento para relajarte y pensar en el proyecto en el que vas a trabajar para que le des a tu mente la claridad que necesita, cuando estamos relajados somos más creativos y disfrutamos más del proceso conscientemente. Si haces esto con tu lista de cosas que tienes que cumplir, acabarás haciéndolas todas y con ello incrementarás tu productividad y reducirás el estrés de estarlas posponiendo para otro día porque no te gustan o te aburres con ellas.

Recuerda que si te quieres sentir bien debes trabajar en lo que te gusta y también en lo que te llevará a tener la vida que deseas aunque no te guste lo que tengas que hacer para conseguirlo.